"Escritura de medianoche N°1"

(Si le colocas "Play" te recomiendo que te coloques audífonos y solo le subas el volumen hasta "6" que es bastante bajo, pero se aprecia mejor así, si quieres seguir leyendo)

Más que una pregunta, una respuesta "qué otra cosa pueda hacer" (Gustavo Cerati, Crimen)

No sé porqué, pero me encanta esa frase. Recuerdo que la primera vez que la escuché fue vagando (como siempre) en youtube, y de pronto en una de las tantas listas de reproducción apareció esta canción, de un concierto en Viña del Mar, Chile; donde Cerati dice esa frase al inicio de la canción Crimen que usualmente (siempre) la canto a todo pulmón, esté donde esté. 

En fin, no sé porqué recordé eso, pero como ya pudiste notar...estás leyendo lo que una persona como yo piensa a medianoche. Y cuando escribo "una persona como yo" solo estoy refiriéndome a que cualquier persona se puede colocar a pensar en cosas extrañas a esta hora.

Pero como siempre, me estoy saliendo del tema principal que es...escribir, al fin y al cabo. 

Cuando era pequeña, era de las niñas más ordenadas y meticulosas que puedes imaginar, pues mi hermano pequeño era el huracán, y yo solo un día nublado sin mayor emoción. Pero nuevamente, me estoy escapando. Recuerdo que a medida que iba creciendo esos nerviosos eran cada vez peores, y me descubría haciendo cosas inapropiadas para calmarlos. Al final del día todo se acumulaba, y sabía que algún día iba a explotar, y lo hice, y fue uno de los peores días de mi vida. No hablaré más de ese día por ahora, no lo profundizaré, pero ese día me llevó a un montón de situaciones desagradables.

Un millón de técnicas de relajación, medicamentos para relajar los músculos, e incluso un nuevo tipo de alimentación. Pusieron literalmente mi mundo de cabeza. Al mes ya estaba en los huesos, temblaba de pies a cabeza y los nervios y los famosos "tics" (que son reflejos físicos involuntarios) eran cada vez más fuertes y variados.

Y durante todo ese tiempo yo había dejado de lado la escritura, y la lectura.

Recuerdo que me la pasaba todo el día en cama, veía televisión, apenas comía, y lo que más hacía era dormir. 

Pero entonces creo que soñé con un personaje de un libro o pensé en él media dormida, y lo busqué a través de mi móvil, y comencé a leer.

Luego de unos días, ya tenía mejor aspecto. Mi madre me dejó utilizar el portátil y continué uno de los tantos libros que tenía. 

Poco a poco ella notaba los cambios en mi, y yo seguía enfocada en leer y escribir más.

A las dos semanas podía comer bien, la dosis de los medicamentos se redujeron a la mitad, y los tics desaparecieron. Los nervios seguían, claro, pero los podía controlar.

Entonces aquí estoy, mucho, mucho, mucho, mucho tiempo después para decirles...no a todos nos sirve las técnicas de relajación, o cosas por el estilo. A mi, me ayudó la lectura y la escritura, y lo sigue haciendo hasta el día de hoy.

Busquen su propia manera de manejar sus problemas de buena manera, sin que su cuerpo sea quien reciba todo el peso de ello, se los digo por experiencia propia. No digo que el ejercicio, los medicamentos recetados o el cambio de alimentación sea malo, pero si que busquen además de eso algo que los alegre, que los haga sentir ustedes mismos. Sé que es difícil en estos días estar bien física y psicológicamente, pero es posible, si lo es.

Bueno, creo que solo era eso. 

Si quieren puedes comentar abajo que les ayuda a ustedes a relajarse :D

All the love.

Alex. S. Blue